¡Qué pena! Por poco y Beyoncé enseña todo durante un concierto en Nueva York, resulta que la cantante se encontraba como siempre guapísima cantando ante cientos de fans cuando de pronto su blusa le jugó una muy mala pasada y se abrió, dejando al descubierto su brassiere.
Después de iniciar una interpretación con mucha energía, con saltos y movimientos bruscos, donde cantó "Holy Grail", Beyoncé tuvo que bajar la intensidad de su presentación cuando se dio cuenta de que su blusa se abría poco a poco por lo que la intérprete tuvo que terminar su presentación cubriéndose con una mano el pecho.
Pero para fortuna de todos y desgracia de Beyoncé, el momento quedó inmortalizado en video.